18 Años de Meditación Activa me Trajeron estos Beneficios (Mi historia)

Iba buscando bienestar, respuestas, felicidad. (nunca imaginé que terminaría guiando y diseñando mis propias meditaciones activas). Para ello transité diferentes religiones y en todas encontré lo mismo: Gente maltratada, sin trabajo, que se reunía con otras semejantes o que incluso estaban peor. Por eso, no duré mucho en ninguna, además todas prometían lograr un cambio positivo en la gente a cambio de diezmos, limosnas, etc., tiempo de orar, rezar, ¡confesar pecados y ¡cómo no! Adorar a dioses, estatuas…

 

Aun así, quiero decir que fue mi vivencia y que respeto a todas las religiones y creencias. Pasa que me di cuenta que para estar bien, tenía que reunirme con gente que también lo estuviese y no al revés.

Todo cambió inesperadamente.

 

Meditación activa “Mi gran descubrimiento”

Un día, caminando por las calles de la ciudad de Neuquén en Patagonia Argentina, encontré “Centro Osho”. Había un cartel que decía Reiki y meditación.

Siempre, desde pequeña he tenido un sentido de la percepción bastante desarrollado, visiones, flashes, avistamientos varios y posteriormente contacto. Por eso, el mundo místico no me era desconocido, sino todo lo contrario y me fascinaba.

Pensé, voy a entrar a ver qué hay en este centro.

 

Me pidieron que esperara y que mientras tanto si quería, escogiera un libro de la biblioteca de la sala de espera para leer.

No olvidaré nunca ese momento, porque allí comenzó todo.

Tomé el libro de la Medicación a la Meditación (autor Osho). Lo abrí en una página cualquiera y allí decía: “No me creas nada, no sigas ni adores a nadie, no creas nada a nadie, solo vive tu experiencia y cree en ti”.

Al leer esto pensé, pero sobre todo sentí como una especie de alivio y dije, ¡Por fin! ¡Acá me quedo!

 

Así es que comencé a formarme en la escuela de terapeutas Reiki, dónde también tomé el curso de Tarot Osho Zen, aprendí cristaloterapia y meditaciones activas. Estas últimas eran mis enemigas.

 

Mis maestros Tabish y Azima siempre estaban diciendo que había que asistir a las meditaciones. Yo me hacía la distraída y no iba a ninguna. Un día Tabish me dijo Vero, tienes que venir a meditar. ¡Yo le dije, No! Eso no va conmigo, yo no estoy para perder tiempo, tengo 2 hijos, una casa que atender y mi empresa, eso de sentarme en silencio no me va.

Y me dijo, si quieres ser una buena terapeuta y cambiar de verdad tu forma de vida tienes que meditar, además la meditación activa está diseñada especialmente para occidentales, te va a gustar ya verás.

 

Bueno, como en muchas cosas en mi vida, me fui al otro extremo.  Yo antes era así, o todo o nada y si era todo era TODO. Así que en lugar de comenzar meditando una hora, me apunté a una jornada de meditaciones activas. Esto era todo el día meditando, parando sólo para hacer una comida muy ligera y sin hablar, todo de modo consciente, presente.

 

Las meditaciones eran muy diferentes a lo que yo creía, nada de estar quieto, sino más bien todo lo contrario, además me hicieron conectar con un volcán de emociones y me movilizaron muchísimo. Fueron 7 meditaciones activas en el mismo día, todas trabajaron un aspecto del ser y para mí, que nunca había meditado fue realmente mucho.

Así es que luego de semejante experiencia, comencé a ir al menos una vez por semana, fui aumentando la frecuencia y ya también comencé a meditar en casa. Luego llegaron los programas de 21 días de meditación muy activa como la dinámica, en dónde cada día sin excepción, teníamos que estar a las 6 de la madrugada en el centro para meditar.

 

Los cambios no demoraron en llegar, la energía en mi cuerpo y en mis manos era algo de otro mundo, nunca había sentido tal cosa. Al igual mis niveles de percepción e intuición se agudizaron muchísimo. Mi vida cambió por completo. Relaciones, formar de pensar, hábitos, pero todo fue sin proponérmelo. La energía fue actuando en mí.

 

Y, sinceramente, creo que, si no hubiese sido pro el Reiki y la meditación, no sé si podría haber superado tantas situaciones difíciles por las que he pasado.

Por eso, hoy luego de 18 años meditando cada día al menos una vez puedo decir que todo lo que me enseñaron y dijeron mis maestros es verdad.

 

"18 Años de Meditación Activa me Trajeron estos Beneficios (Mi historia)"

9 Beneficios de la meditación activa (pero hay más)

 

  1. Son como un ejercicio físico, movilizan todo el cuerpo ya que son en movimiento
  2. Se trabaja con un objetivo, trascender miedos, encontrar el centro, abrir o desbloquear chakras, ganar confianza, etc.
  3. Oxigenan las células y el cuerpo en general, respiras mejor y más profundo
  4. Te llevan al momento presente
  5. Elevan el estado de consciencia
  6. Tanto el cerebro como el cuerpo físico envejecen más lento, tiene un efecto antioxidante, y no es por nada pero ¿Cuántos años me das? Nací en 1974 ¡saca las cuentas! ¿Lo aparento?
  7. Estimulan la circulación
  8. Incrementan la concentración y la memoria
  9. Favorecen el aumento de la autoestima y la confianza

Por eso ahora, soy experta en meditación activa y en lecturas ¡Me encantan!

¿Has practicado meditación activa? ¡Me encantaría que comentaras tu experiencia! Y si te ha gustad esta entrada, comparte! Gracias!

Post by Verónica Alva

 

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